A la sombra de los gigantes que participan de la Champions, otros pequeños quieren dar la sorpresa. Con nombres desconocidos (como Unirea Urziceni y Debreceni) y con estadios similares a los del ascenso de Argentina, quieren sorprender en la competición que más dinero reparte.
La Champions League es el torneo de clubes más importante del mundo. Un botón de muestra: un estudio encargado por Mastercard estimó que el campeón de la temporada 2009/10 recibirá unos 110 millones de euros y el subcampeón, unos 65 millones de euros. Otro detalle: la última final, disputada en Roma entre el Manchester United y el Barcelona, movió unos 267 millones de euros, de acuerdo con otro informe afín. Ahora la competición ya sabe quiénes serán los 32 participantes que comenzarán la fase de grupos. Están casi todos los gigantes de Europa. Aquellos dueños de viejas glorias y los actuales multimillonarios capaces de contratar supercracks. Pero también están los otros, las cenicientas. Esos equipos cuyos nombres resultan una rareza en la constelación de estrellas universales.
Un vistazo por la serie de grupos ofrece a seis equipos que parecen ajenos a las estridencias del fútbol más caro del mundo: Maccabi Haifa, FC Zurich, APOEL Nicosia, Debreceni, Rubin Kazan y Unirea Urziceni. También podrían agregarse dos campeones bajo el rasgo de la sorpresa: el Wolfsburgo, que sorprendió en la Bundesliga, y el AZ Alkmaar, que rompió la hegemonía de los grandes en Holanda. Pero estos últimos dos participantes llegan con un antecedente que los impulsa: pertenecen a Ligas que conocen de consagraciones frecuentes a nivel continental.
La Champions League cuenta con varios de los mejores estadios del mundo como escenario de sus partidos: el Camp Nou y el Bernabeu, en España; el Meazza, en Italia; el imponente Old Trafford, de Inglaterra, entre tantísimos otros... Pero también cuenta con estadios que parecen de mentira en semejante contexto de millones. El Unirea Urziceni, de Rumania, será local en el Tineretului, un estadio similar al de, por ejemplo, Defensores de Belgrano: cuenta con apenas 7.000 espectadores. Fundado en 1954, llegó hace dos temporadas a la máxima categoría de su país, ganó la última Liga de la tierra de Drácula, con Pablo Brandán (ex Huracán e Independiente) en el plantel, y ahora va tras los pasos de lo imposible: repetir el éxito del Steaua Bucarest, el único equipo de esa geografía en ganar la Copa de Campeones (venció en la final al Barcelona en la final de 1986).
El Maccabi Haifa, de Israel, fue fundado en 1913 y es uno de los motivos de orgullo del fútbol de su país. Un detalle: fue el único equipo isrealí en alcanzar la segunda fase de grupos en la Champions League. Campeón de once Ligas y de cinco Copas, fue impulsor de figuras tales como Haim Revivo, Yossi Benayoun, Aiyegbeni Yakubu y Dudu Aouate. Ahora cuenta con Eial Strahman, un juvenil ex River pretendido por Huracán. El delantero convirtió cuatro goles en su primera práctica.
El FC Zurich nació en 1896 y se llamó de varios otros modos hasta su fusión: FC Turicum, FC Exelsior y FC Viktoria. Nació como un club de boxeo, pero pronto priorizó el fútbol: la primera Liga de Suiza la ganó en 1902. Ahora, acumula nueve Campeonatos locales y cinco Copas. A la sombra de otros grandes del fútbol de su país (como Grasshoppers y Basel) buscará sorprender ante los ojos de los gigantes del Viejo Continente.
Chipre jamás participó de una fase final de la Eurocopa ni de un Mundial. Es un país menor en el mapa futbolístico. Pero ahora, el APOEL Nicosia está convencido de que puede dar el golpe. El club más campeón de esta isla mística (ganó 19 Ligas), accedió a la fase de grupos. La fundación del club sucedió cuando un grupo de cuarenta personas se reunió y estableció las bases para la creación de un club de fútbol que representara a todos los griegos de la capital chipriota. La reunión tuvo lugar en una tradicional confitería, sobre la calle Ledra. Después de un viaje del club de fútbol por Egipto, la asamblea general de 1928 decidió que los jugadores demostraron que no eran sólo buenos futbolistas, sino también unos excelentes atletas. Por lo tanto, se decidió crear una pista atlética, además de un campo de fútbol. En consecuencia también se modificó el nombre: APOEL fue adoptado para tener en cuenta esto: la A de atleta en lugar del inaugural POEL.
El Debreceni Vasutas es la gran aparición del fútbol húngaro de la última década. Una suerte de Vélez local que les restó protagonismo a los tradicionales grandes como el Ferencvaros y el Ujpest Dosza. Ganó (entre Ligas y Copas) diez títulos desde 1999. Y ahora tratará de reivindicar al fútbol que crió a Puskas y a Kocsis.
El Rubin Kazan también es una cara nueva del fútbol europeo. Con Alejandro Domínguez como figura y Cristian Ansaldi como integrante del plantel, fue campeón en 2008 por primera vez en su historia. Ahora, siete años después de llegar a la máxima categoría del fútbol ruso, procurará demostrar el crecimiento de una Liga proclive a contratar figuras relevantes en las últimas temporadas.
Estos seis clubes son las seis cenicientas de una Champions League que, por ahora, parece reservada para los grandes dueños históricos. De los pequeños con sueños enormes depende el futuro inmediato.
Fuente : El Clarín.
El Wolfsburgo puede dar sorpresas en la champions... es un campeon de una liga importante que esta siendo menospreciado por no ser el Bayer Munich o por lo menos el Leverkusen. Con jugadores como Dzeko, Misimovic y Grafitte se cansaron de perforar las metas Alemanas la pasada temporada, afortundamente su nuevo tecnico mantien el esquema de su antecesor que los llevo a ser uno de los equipos mas espectaculares en varios años en la Bundes.
ResponderEliminara ver si no le pasa lo que al stutgart o como se escriba , que al año siguiente d ser campeon valio pito
ResponderEliminarTampoco doy un ápice por el Wolfsburg , este torneo (la champions) se ha vuelto tan mamonamente exclusivo que parece ser solo para equipos ricos, los clubes pequeños que tienen una temporada fenomenal les cuesta mucho al año siguiente mantener el nivel que los llevó ahí, ya sea porque los desmantelan los grandes , cambian de tecnico o los jugadores que la rompieron vuelven a su estado normal de "jugadores medianos".
ResponderEliminarMe encantaría ver a un equipo salido de una liga "debil" en la final.